Mucho antes de que empezara el auge del movimiento ‘verde’ como lo conocemos hoy en día, Xerox ya era consciente de que el cuidado del ambiente era parte esencial de una política global de parte la ciudadanía corporativa. Con los cambios que estaban ocurriendo en la industria automotriz y en otras industrias, el reducir los desperdicios y conservar la energía era prioridad para poder seguir viviendo en un mundo acorde con la naturaleza.
Desde los comienzos de Xerox en 1960, la sostenibilidad ha sido un aspecto de gran importancia para la compañía. Como líder en el campo de la impresión, Xerox necesitaba hacer cambios en su infraestructura, pero estos cambios toman tiempo.
Ya desde aquel entonces introdujo características ‘verdes’ en sus equipos, como: impresiones a doble cara e impresiones por pedido, lo que ahorra un número considerable de talas de árboles; funciones que permiten apagar de forma automática los equipos, con el consiguiente ahorro de energía, y la patente de un sistema de tinta sólida que pone más color en la página y generar menos desperdicios.
También ha favorecido el uso del papel reciclado en las oficinas, así como también el reciclaje de los cartuchos de impresión, y ha promulgado normas estrictas de sostenibilidad para sus proveedores de papel.