Por Daniel Reyes
Bonao, provincia Monseñor Nouel. Con el respaldo de destacados deportistas como Chiqui Mejía y Quique Sosa, junto a varias ligas deportivas de Bonao, se realizó este fin de semana una marcha pacífica que recorrió diferentes calles de la ciudad, en defensa de las principales instalaciones deportivas y recreativas de la provincia.
Un respaldo muy especial lo brindaron Wellitong Mejía y Ricardo Genao, reconocidas personalidades de Bonao que siempre se identifican con las mejores causas sociales y deportivas de la comunidad. Su participación fue valorada como una muestra de compromiso con el futuro de la juventud y la preservación de los espacios que forman parte de la historia de Monseñor Nouel.
La manifestación partió desde el estadio de béisbol Play 40 Aniversario de La Salvia, donde cientos de atletas, dirigentes deportivos y comunitarios levantaron su voz en contra de la amenaza de pérdida de espacios que históricamente han servido para el desarrollo del deporte y la integración social.
Al concluir la caminata, el Comité de Defensa de Instalaciones Deportivas de Bonao entregó un documento formal al alcalde Eberto Núñez y a la gobernadora provincial Adela Tejada, en presencia del senador Héctor Acosta y de los diputados de Monseñor Nouel. Dicho documento será remitido al presidente de la República, Luis Abinader, con la solicitud de que intervenga en la situación.
El escrito expone la preocupación por el riesgo de que se pierdan el estadio 40 Aniversario, el Campo de Golf, las áreas verdes donde más de mil mujeres practican zumba cada semana, así como los terrenos de la cooperativa Coopyuna, a raíz del cierre de la empresa Falconbridge.
“Si estas instalaciones se pierden, quedarían en las calles más de tres mil niños y jóvenes que practican béisbol, miles de jugadores de golf que participan en torneos nacionales e internacionales, además de cientos de familias campesinas que dependen de la cooperativa”, señala el documento.
El comité pidió que dichos espacios sean declarados de utilidad pública, reconociendo a los actuales usufructuarios como legítimos custodios, pues son quienes han mantenido en buen estado las instalaciones con recursos propios durante años.
La actividad contó con amplia participación ciudadana y fue descrita como una manifestación de unidad entre atletas, dirigentes comunitarios y autoridades locales, todos con un mismo propósito: defender el patrimonio deportivo y social de Monseñor Nouel.
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